Versículo
9: “Mejor es que vayáis a la tienda a
comprarlo”.
Releemos: “Si
lo que os falta es combustible, os lo podemos prestar o lo podéis comprar. Si
lo que os falta son las ganas de ir al encuentro, eso no os lo podemos prestar.
Hay cosas que, si no las tienes, no te las puede prestar nadie, ni hay tienda
que las venda. Si me dices : “Préstame para comprar un bocata”, te puedo
prestar. Si me dices, “No tengo ganas de comer, préstame ganas", no te las
puede prestar”.
Versículo 12: “No sé quién sois”.
Releemos, retraducimos y reinterpretamos:
“Chicas, estáis desconocidas. Chica, no se te conoce. Hoy no
eres tú. ¿Qué te pasa hoy que no pareces la misma? Esta no es la que yo conozco
y quiero. Mujer, sé tú misma”.
En
estos dos versículos nos interpela el Evangelio para salir del autoengaño, del
sí mismo autoengañado y descubrir un sí mismo más auténtico y profundo: sé tú
misma (para lo cuál tendrás que dejar de ser lo que te crees que eres y lo que
los demás se creen que eres; sal de tí para encontrarte, piérdete para
recuperarte en Mí.
“Alma,
buscarMe has en tí, buscarTe has en Mí”
Juan Masiá
No hay comentarios:
Publicar un comentario