miércoles, 27 de abril de 2016

Si me amas


1 comentario:

HTTP://rosadeabril-m.blogspot.com dijo...

Nuestra fe pascual es muy fuerte, pero los cristianos la vivimos con pena porque el Señor resucitó hace muchísimo tiempo y su victoria no acaba de manifestarse visiblemente al mundo.

El Señor no nos ha abandonado. Ha regresado a su Realidad; ha ido al Padre y, desde allí, nos ha enviado el Espíritu Santo, el Defensor; una presencia interna en nosotros que nos proporciona memoria e inteligencia del mensaje de Jesús; nos da mucha Paz y mucha fuerza para que continuemos en el mundo la misión que nos ha encomendado.

La segunda lectura nos coloca en el camino hacia la nueva Jerusalén, ciudad de Dios y de su Pueblo: ¡Bellísima, donde todos cabemos..!Allí ya no hay Templo ni sol ni luna, porque toda ella está iluminada por la Presencia luminosa de Dios.

Sin dejar de ser humana, la Iglesia es impulsada a abrirse cada día más a todos los hermanos que buscan a Dios, como dice el mensaje de la asamblea reunida en Jerusalén:" El Espíritu Santo y nosotros hemos decidido..."