Ayer 27 de septiembre de 2013 el santo padre ha encontrado en el Aula Pablo XVI a 1600 catequistas de 50 países, muchos de ellos acompañados por sus obispos y sacerdotes para el Congreso Internacional de Catequistas que se realizó en Roma con motivo del Año de la Fe.
El santo padre ha comenzado recordando que la catequesis es un pilar para la educación de la fe, que no es un trabajo como cualquier otro, pero que debe ayudar a los niños, jóvenes y adultos a conocer a amar cada vez más al Señor, o sea una de las aventuras educativas más bellas. Del mismo modo ha subrayado que no es lo mismo "ser" catequista que "trabajar" como catequista, ya que el ser catequista es un vocación.
Ser catequista --dijo el papa Francisco-- requiere amor, amor cada vez más fuerte a Cristo y amor a su pueblo santo y este amor necesariamente viene de Cristo. Y les ha preguntado ¿qué significa este venir de Cristo para un catequista? Y lo ha explicado "como hacían los viejos jesuitas": en tres puntos.
En primer lugar recomenzar desde Cristo significa tener familiaridad con Él, y añade que "si estamos unidos a Él podemos llevar fruto, y esta es la familiaridad con Cristo".
El segundo elemento que ha dado ha sido: recomenzar de Cristo significa "imitarlo en el salir de sí e ir al encuentro con el otro".
Y en tercer lugar, "recomenzar desde Cristo significa no tener miedo de ir con Él a las periferias.
Replanteemos pues cual es el perfil del catequistas a raíz de estas palabras.
El santo padre ha comenzado recordando que la catequesis es un pilar para la educación de la fe, que no es un trabajo como cualquier otro, pero que debe ayudar a los niños, jóvenes y adultos a conocer a amar cada vez más al Señor, o sea una de las aventuras educativas más bellas. Del mismo modo ha subrayado que no es lo mismo "ser" catequista que "trabajar" como catequista, ya que el ser catequista es un vocación.
Ser catequista --dijo el papa Francisco-- requiere amor, amor cada vez más fuerte a Cristo y amor a su pueblo santo y este amor necesariamente viene de Cristo. Y les ha preguntado ¿qué significa este venir de Cristo para un catequista? Y lo ha explicado "como hacían los viejos jesuitas": en tres puntos.
En primer lugar recomenzar desde Cristo significa tener familiaridad con Él, y añade que "si estamos unidos a Él podemos llevar fruto, y esta es la familiaridad con Cristo".
El segundo elemento que ha dado ha sido: recomenzar de Cristo significa "imitarlo en el salir de sí e ir al encuentro con el otro".
Y en tercer lugar, "recomenzar desde Cristo significa no tener miedo de ir con Él a las periferias.
Replanteemos pues cual es el perfil del catequistas a raíz de estas palabras.
Tomado de Zenit.org
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