Situados en el tiempo litúrgico de adviento, tiempo de espera y de preparación, el evangelio de esta semana nos presenta la figura de Juan el Bautista.
Aparece que como el precursor del Mesías, aquel que prepara el camino, sin preocupaciones terrenales, como ropa y comida, pues es conocedor de lo fundamental y basa toda su vida y acción en intentar poner las mejores condiciones de posibilidad para la llegada del Cristo. Aparece como un profeta, como un actual educador, que insta, que prepara, que aconseja, que modela a aquellos que quieran escucharle. Permanece en un segundo plano, discreto. Proclama su llegada, lo anuncia con toda su alma.
La gente lo va a ver, lo quieren escuchar, es un referente, pero él sólo muestra el camino, él precede, ayuda a convertir los pecados pero el que ha de venir cambiará, transformará y renovará toda la realidad.
Prepara tu corazón para el gran acontecimiento de la Navidad. El hijo de Dios quiere nacer dentro de ti.
¿Le dejas espacio? ¿Estás preparado para dejarte transformar?
 |
| Pincha para el material |
No hay comentarios:
Publicar un comentario